Año Nuevo Bajo Fuego :.

Por un lado, el mundo celebraba la llegada de un nuevo año, reunidos en el calor de sus hogares, en familia y bajo los estruendos y coloridos destellos de los fuegos artificiales; y por el otro lado, observaba ciego, sordo y mudo, la llegada de un nuevo año para el pueblo Palestino resistente, heroico y vejado, bajo el fuego infernal causado por los misiles y la artillería del Estado sionista de Israel, bloqueados y cercados tal como si fueran animales en zoológico, en un área de 362 km², 40 Km. de largo por 14 Km. en la parte mas ancha, siendo la porción de territorio que posee la densidad poblacional mas alta del planeta, con mas de 4110 personas por km², estamos hablando de 1.500.000 habitantes solo en la Franja de Gaza, donde por 22 días continuos estuvo bajo una lluvia de fuegos, sin luz eléctrica, ni agua, ni comida, los hospitales saturados y sin suministros, la poca y muy moderada ayuda humanitaria estaba estancada en Egipto a las puertas de la ciudad en la frontera, en el puesto de control sionista de Rafah. “El mundo contemplaba un verdadero holocausto”, con los saldos que la gran mayoría conoce de mas de 1500 muertos y aproximadamente 5000 heridos, no es secreto para nadie que mas del 75% de los muertos eran civiles, del cual, el 60% eran mujeres, niños y ancianos, según estadísticas de la ONU. Todo esto sin contar que a diario hay muertos civiles, a la vista de esto ya los muertos no eran en su mayoría objetivos militares según lo manejaban los grandes medios en manos de los sionistas, a esto no escapan que también fueron objetivos la Cruz Roja Internacional, tanto miembros como instalaciones, la Media Luna un equivalente a la Cruz Roja, instalaciones de la ONU, depósitos de suministros de alimentos y medicinas, escuelas, hospitales, todo con la excusa de que eran usadas todas estas instalaciones por la resistencia Palestina para lanzar los proyectiles hacia los asentamientos ocupados por los sionistas.

¿La ONU? Nido de incompetentes e inútiles, el cual un solo país la tiene secuestrada, donde la mordaza es el injusto e indigno derecho a veto en el Consejo de Seguridad, instrumento títere que representa una burla y un irrespeto a los demás 191 países que integran las Naciones Unidas. Una verdadera dictadura por parte de este país, donde hace y deshace dentro de esta organización resguardando intereses del lobby sionista. Cada vez que se reunía este consejo de seguridad, para tomar acciones inmediatas a través de resoluciones para el alto al fuego inmediato en defensa y protección de la población civil, las emergencias sanitarias y humanitarias que están padeciendo por los crueles ataques de la maquinaria bélica sionista constantemente en la Franja de Gaza, en el momento de la votación, el imperio yankee veta la aprobación de la dicha resolución, siendo cómplice y coparticipe de la masacre que se estaba cometiendo en ese momento. No fue ni será sorpresa, ya que la historia esta llena de infinitas y reiteradas situaciones similares, donde no hubo ni habrá nunca una resolución de condena en contra del Estado sionistas de Israel, dándole pie y autoridad de seguir actuando bajo la tutela y el apadrinamiento de los Estados Unidos de Norteamérica.

Las Naciones Unidas solo esta pintada para recoger la plasta que deja en su camino USA y sus aliados incondicionales, reparando y reconstruyendo todos los lugares por donde pasa la aplanadora bélica imperial y sionista.

¿Los Medios? Censura total para los medios de comunicación internacionales, solo los seleccionados por parte del Estado sionista podría tener una limitada y supervisada cobertura del grave acontecimiento, donde fueron marginados a unas gradas laterales ubicadas del lado del territorio ocupado a no menos de 4km del lugar de los hechos, dándole acceso solo a los sitios que el ejercito escogía, el cual los conducían en una caravana blindada; gracias a la labor de algunos medios alternativos y valientes reporteros que por responsabilidad propia lograron burlar el bloqueo impuesto por el Estado sionista pudieron entrar al lugar de los hechos, una mirada desde adentro, y poder captar las impresiones de lo que realmente estaba sucediendo, vivieron en carne propia el horror que se estaba cometiendo, donde todos pudimos ver a enviados de Naciones Unidas y Cruz Roja Internacional dando declaraciones con la voz quebrantada, sin explicación por tanta impunidad y con el mundo con los brazos cruzados, solo como espectadores del hecho.